Columna | Semillas de Pitaya

Semillas de Pitaya | Entre canicas y titanes

Nueva literatura mexicana

Por Luis Olaf del Lago

De entre todos los juguetes que pueden habitar mi memoria hay uno en especial que siempre me pareció mágico, las canicas. Más allá del juego, esos pequeños objetos se presentaban ante mis ojitos como un embrujo hecho miniatura. Llevar una o varias de esas galaxias encerradas en mi bolsillo me daba una confianza que por mucho tiempo no pude describir. El recuerdo de mis dedos jugando con esas esferas de cristal invadió mi mente al leer una frase de Laura Sofía Rivero en una de las primeras páginas de Tomografía de lo ínfimo, (2018): “¿O la perfección de Dios en una canica?” Me quedé pensando en esa pregunta un buen rato. Descubrí esa misma tarde que había encontrado la explicación exacta de la anatomía de la canica y de todos los sueños que en mis manos regordetas se formaban cada vez que sentía las bolitas de cristal en mis bolsillos. 

Ensayar el mundo es darle forma a la arcilla, es caminar con nuestros autores amados y pelear a ratos con los que no estamos tan de acuerdo. Al menos para mí, leer ensayos me permite pasear. Sin embargo, aunque respetado, el ensayo es un género literario a veces incomprendido y francamente poco valorado, tanto por los lectores como por las editoriales. 

Laura Sofía Rivero es una joven escritora mexicana nacida en la Ciudad de México a principios de los años noventa. Leer sus textos me ha llevado a pasear por consultorios de podología, por baños públicos y por supuesto, por la circunferencia perfecta de una canica. Más allá de todos los premios que Laura Rivero ha recibido me gustaría compartir con ustedes una mirada que le da voz a aquello que dejamos pasar desapercibido. Los textos de la autora gravitan en el mundo de lo cotidiano y se tiñen de un humor que logra conectar de inmediato con el lector. Meditación sobre las uñas es , por ejemplo, un texto que nos invita a tomar conciencia de nuestro cuerpo y de todas las pequeñas presencias que nos constituyen. ¿Quién no se ha sorprendido de la importancia de una uña al sentir un pisotón en la punta del pie? Si la uña enferma, ¿a dónde la llevamos a atenderse? El pequeño dedo doliente va a filtrar su dolor por todo nuestro cuerpo hasta que encontremos al doctor de pies y uñas, dentro de su consultorio lo inesperado puede ocurrir.

Posteriormente, mis pasos y mi mente visitaron las tuberías y las casas mexicanas en donde parece que siempre vive una bolsa que guarda bolsas. Laura Rivero me enseñó que así como hay poesía y novela amorosa, también se puede ensayar con el amor y que el tocino tiene mucho de pornográfico. En su Minifacio descubrí con grata sorpresa que las pelusas y las moronas encierran tanta belleza como la inmensidad de la bóveda celeste y que por pequeños que nos sintamos hay potencia en cada uno de nosotros. Todo este caminar se lo tengo que agradecer a su libro Tomografía de lo ínfimo, pero el sendero no acaba ahí. 

Además de adentrarse en el mundo del género alguna vez creado por Montaigne, nos ofrece reseñas de sus lecturas, textos que escapan a la definición misma de un género literario establecido, y a ratos, clases abiertas al público para entender nuestros propios paseos internos y volverlos texto. Como ex alumno y seguidor de esta talentosa escritora mexicana los invito a acercarse al ensayo, al ensayo mexicano que se está escribiendo en tiempos de pandemia y por supuesto al trabajo de Laura Sofía Rivero. 

La labor de esta joven voz mexicana la pueden encontrar aquí, donde se encuentra toda la información de sus publicaciones y talleres. Para cerrar esta invitación los dejo pensando en el titán que vive en cada uno de ustedes y en los caminos que podrían recorrer con él a través de la lectura de un ensayo, porque como nos dice Laura Rivero, “hasta el Titán está compuesto de átomos”. 

Luis Olaf del Lago 

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